Como se puede ver en el gráfico semanal, el Ibex, desde que perdió el nivel entorno a los 11.000 puntos y con un alto volumen de negociación en abril del pasado año, lleva hecho unos 6 ataques a la zona, pero sin éxito ninguno, a la vez que ha ido consolidando un importante nivel de soporte, con cuatro puntos de apoyo, siendo el primero de ellos el que coincidió con el mínimo del índice de los últimos años, en marzo de 2009.
Desde julio de 2010 se ha venido moviendo de manera lateral y con bastante volatilidad; este hecho lo confirman las grandes velas que se pueden ver en el gráfico semanal.
Si nos fijamos, tenemos el índice perfectamente canalizado entre el soporte oblicuo (verde) y la resistencia de la zona de los 11.000 (línea roja), formándose una cuña.
Echándole un vistazo a la gráfica se puede ver que esta cuña es cada vez más estrecha, y de hecho se puede ver cómo en los últimos meses el recorrido del índice ha bajado enormemente; de hecho se ha venido moviendo en lo que llevamos de año en un palmo de unos 700-800 puntos.
Por otro lado, se puede ver cómo el índice aguantó el retroceso de Fibonacci del 61,80%, nivel fundamental para buscar puntos de vuelta. Esto llevó al índice en su momento de los 8.800 hasta los 11.000 puntos.
En las próximas semanas el soporte pasará por el retroceso de los 38,20%, nivel también bastante a tener en cuenta, por lo que podría ocurrir que cuando se dé esta circunstancia, se decida bien a romper el soporte o coger impulso para atacar nuevamente los 11.000 e intentar romperlos.
Por tanto, pensamos que todo se decidirá en dos o tres semanas.
Por el momento los volúmenes de negociación son bastante bajos, por lo que una variación brusca en el volumen en gráficos semanales también nos puede dar pista de para dónde se va a decidir.
Esperaremos y veremos a ver qué pasa.
