Una de las premisas a la hora de invertir en Bolsa es que hay que hacer los deberes, es decir, nunca debemos invertir siguiendo las recomendaciones de terceros sin antes hacer el estudio correspondiente.
El escuchar las recomendaciones de un gurú suele ser entretenido, en ocasiones educativo, pero en muchas ocasiones no significa el éxito en la operación.
Debemos tener muy en cuenta que todo esto de los gurús suele resultar bastante sospechoso, y no sólo en el mundo de la Bolsa, sino que ocurre lo mismo con todos los sectores y especialidades.
¿Por qué? Porque en el mercado bursátil, un gurú se hace famoso porque acierta en sus análisis y predice, de alguna manera lo que va a pasar, pero si realizamos un estudio de todos estos casos, veremos que la mayoría de gurús se han hecho famosos en situaciones muy extremas del mercado, es decir, donde prácticamente el más inculto en la materia podría acertar. No olvidemos nunca que estas personas viven de las recomendaciones que realizan, no de la rentabilidad que realmente consiguen los inversores asesorados por ellos.
Con esto tampoco queremos decir que no se les tenga en consideración, puesto que muchos de ellos pueden tener sistemas de trading con un porcentaje de operaciones ganadores de un 70%, lo que está francamente bien. Lo que queremos decir es que no ofrecen el 100% de garantías, motivo suficiente para que a la hora de seguir sus recomendaciones, al menos hagamos nuestro análisis y comparemos, que veamos si se adapta a nuestro sistema de inversión, si los niveles de stop-loss son compatibles, etc.
Por tanto, no debemos creer ciegamente en terceros, por mucho gurú que sea. Al menos hay que darle una sombra de duda y estudiar la inversión con detenimiento. Si alguien te dice que te tires por la ventana tú no te tiras, por muy gurú o famosa que sea la persona de la que se trate.
Seguiremos en el próximo capítulo con más errores típicos…